La OMS y el Glifosato de Monsanto
Autor: Antonio Ávila Rosas Profesor Normalista Rural.
En
los últimos años la Organización de las Naciones Unidas a través de la
Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas
en inglés) ha tomado distancia de la Biotecnología y ha declarado que la
única manera de cambiar los problemas de hambre que hay en el mundo es
por medio de la agricultura campesina y familiar con fuertes lazos a
nivel local. Más aún, ha manifestado que éste tipo de práctica estaría,
también, ayudando a aminorar el cambio climático ya que la mayoría se
desarrolla de manera orgánica.
Así que, para muchos no fue una
sorpresa el anuncio de la Organización Mundial de la Salud y de su
Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC, por sus
siglas en inglés) la cual, después de un año de trabajo de 17 expertos
científicos de once países, reportó que el glifosato, el ingrediente activo del herbicida estrella de Monsanto el Roundup, es “probablemente cancerígeno”.
Debido a esto, el herbicida en cuestión debería ser re-clasificado como “2A posible cancerígeno para los humanos”, esto después que durante décadas estuvo en el nivel 4A casi inocuo, en una escala del 1 al 5.
Evidencias
de lo anterior había y… por montones, desgraciadamente la mayoría de
ellas sufrieron el descrédito por parte del departamento entero que
tiene Monsanto para éste fin. ¡¡¡Sí, aunque usted no lo crea!!! Monsanto
tiene un Departamento entero trabajando para desacreditar a todos los
científicos y sus trabajos que hablen en contra de ellos. Esto fue
revelado por el Dr. William “Bill” Moar empleado de esa compañía,
quién durante una conferencia a estudiantes de agricultura para
promocionar su proyecto sobre el gusano que afecta la raíz del maíz
transgénico y, a pregunta de uno de ellos sobre:
_“¿Qué estaba haciendo Monsanto para contrarrestar a científicos que señalan sus productos como peligrosos para la salud?”
.Moar contestó que:
_ Monsanto tenía un departamento entero dedicado a la ciencia de descrédito para todos los que no estén de acuerdo con ellos”.
Yo
agregaría que Monsanto es muy previsor ya que sí eso fallase, entonces,
tendrán que echar mano de los Rambos que pululan en la Compañía Black
Water recién adquirida también por ellos. Ante las circunstancias
actuales ¿Monsanto los pondrá en acción?
Volviendo al caso que nos
ocupa, efectivamente, Monsanto, ni tardo ni perezoso echó a trabajar
ese departamento de descrédito y comenzó su contra- ataque. El 24 de
marzo la empresa dio a conocer su posición respecto al anuncio citado el 20 de marzo en la prestigiosa Revista “Lancet Oncology” de que el glifosato es probablemente cancerígeno, he aquí parte de su comunicado:
“Como
consumidores, la seguridad de nuestros productos es de suma importancia
para cada uno de los que trabajamos en Monsanto. Y queremos ser claros:
todos los usos del glifosato para el cuidado de los cultivos incluidos
en la etiqueta de los productos son seguros para la salud”.
“Este
resultado (del IARC) fue alcanzado por un uso “selectivo” de algunos
datos y es un claro ejemplo de un programa impulsado por agendas
sesgadas”. “En contraste con el examen amplio que los reguladores de
todo el mundo han realizado durante más de tres décadas, la IARC publicó
su clasificación basada en una revisión de datos limitados después de
horas de discusión en una reunión de una semana”.
“Además,
el IARC es uno de los cuatro programas de la Organización Mundial de la
Salud (OMS) que han revisado la seguridad del glifosato y su
clasificación es incompatible con las evaluaciones de los otros
programas”.
“Dos de los programas de la OMS – Grupo Básico
de Evaluación y el Programa Internacional de Seguridad Química-
concluyeron que el glifosato no es cancerígeno. Las directrices de la
OMS para el programa de calidad del agua potable concluyó que el
glifosato no representa un peligro para la salud humana”.
“Creemos que las conclusiones sobre un asunto tan importante como la
seguridad humana deben ser sin sesgo, exhaustivas y basadas en ciencia
de calidad que se adhiera a las normas internacionales”. Concluyeron.
Para
regocijo de la mayoría de los habitantes del Planeta y pesar de
accionistas y empleados de Monsanto el asunto no ha quedado ahí. Esa
misma semana el New York Times reveló en un reportaje que el 4 de marzo
de 1985, la Agencia para la Protección del Medioambiente (EPA) clasificó
al glifosato como un carcinógeno clase C, “que tiene evidencia
sugestiva de potencial carcinogénico”, la cual fue cambiada 6 años más
tarde, cuando estaban a punto de terminarse las investigaciones sobre
los cultivos de maíz y soya resistentes a las fumigaciones de Roundup,
pasando a ser clase E que significa que “no hay evidencia de
carcinogenicidad para los humanos”. ¿Milagro? ¡No! Ya por ahí andaba
Michael Taylor haciendo sus fechorías y brincando de un puesto como
directivo de Monsanto a Funcionario de la Agencia para la Alimentación y
las Drogas (FDA).
Les llueve sobre mojado.
En
esos días Patrick Moore andaba en Europa promocionando los transgénicos
entre los europeos. EuropaBio quien había organizado algunos de esos
eventos pensó que sería una buena historia para la industria
biotecnológica que se entrevistara a Moore, quién había sido
anteriormente fundador de Greenpeace y que ahora era un total impulsor
de los transgénicos. Prueba de ello es que lleva años promocionando el
“arroz dorado”… de Monsanto, el cual, según la compañía va a proveer a
los consumidores de más vitamina A, para, de esta manera, evitar la
muerte de millones de niños que fallecen cada año debido a la carencia
de esta vitamin, principalmente en el Sudeste Asiático. En eso andaba
el susodicho cuando Paul Moreira de la televisora francesa Canal Plus
lo entrevistó. En el transcurso de ella Paul quiso saber cuál sería
la reacción de Moore sobre la epidemia de enfermedades que están
padeciendo cerca de Rosario; Argentina y que están relacionados con los
cockteles de pesticidas usados en los cultivos de Organismos
Genéticamente Modificados (OGM). Fue entonces cuando Moore dijo:
-“
¿Yo no creo que el glifosato en Argentina esté provocando un aumento de
cáncer? Tú puedes beber un medio vaso de glifosato y no te hará daño”.
-“¡Ah, bueno!... ¿Quiere beber algo? Aquí tenemos un poco”. Le dijo el entrevistador.
-“Estaría encantado, aunque no, en realidad no”.
-“No quiere beber”.
–“No, no realmente. Pero sé que no me haría daño”.
-”Entonces, si usted lo dice, aquí está el glifosato”. Insistió el entrevistador.
-“No, no, no, no soy estúpido”.
-“Entonces… ¿Puede ser peligroso? ¿No es así?”
-“ No, no, pero yo sé, pero yo sé”.
-“Es peligroso ¿Verdad?”
-“No, la gente lo usa para suicidarse pero fallan… regularmente fallan”.
-“¡Diga la verdad!”
-“No es peligroso para los humanos. ¡No lo es!”
-“Entonces… ¿Está listo para disfrutar un poco?”
-“¡No!
¡No soy un idiota! La entrevista era sobre el arroz dorado, eso es de
lo que estábamos hablando. Entonces la entrevista ha terminado”.
-“¿Excepto qué…?”
-“La entrevista terminó”.
-“Es una buena manera de resolver el problema”.
“-¡Sí!...¡ ¡Eres un completo idiota!” Al decir esto Patrick Moore abandonó el estudio bastante malhumorado.
Paul Moreira, el entrevistador, recientemente había estado en Argentina filmando un Documental titulado “Transgenic
Wars” (Bientot Dans Vos Assiettes de Greou de Forcé, en francés) el
cual ha obtenido reconocimientos tales como “El Premio de Investigación
en el Festival Internacional Francés de Grandes Reportajes de Actualidad
y el “Jury Jeune” otorgado por alumnos de preparatoria.
Ante estos acontecimientos Monsanto en esa semana vio descender sus acciones en la bolsa un 3%.
Otro asunto importante que va a ocurrir en Estados Unidos es que este año (2015), el glifosato tiene que ser revisado por la Agencia para la Protección del Medioambiente.
¡Se atreverán a actuar con imparcialidad? ¿Reclasificaran al glifosato
como clase 2A? ¿Serán los funcionarios sobornados para que sigan
ocultando la verdad? ¿Qué tanto influenciara a la decisión de los
funcionarios de la EPA la presión de los grupos anti_ transgénicos y el
reporte de la OMS?
Y, aquí en México, ¿Nos quedaremos cruzados de
brazos?¿Seguiremos comiendo nuestra dosis de glifosato gracias a la
permisividad de la Cofepris al permitir el ingreso de alimentos
transgénicos para consumo humano?
Pero vayamos al cono sur a
conocer un poco más sobre la epidemia de enfermedades que están
sufriendo en la localidad de Monte Maíz cerca de la ciudad de Córdoba y
sobre el cual comentara Paul Moreira en la tan memorable entrevista. El
informe final de un estudio epidemiológico sobre los habitantes de ese
lugar dado a conocer por la Universidad de Córdoba arrojó los
siguientes resultados:
*La población de Monte Maíz tiene 5
veces más casos de cáncer que los estimados en la Organización Mundial
de la Salud como promedio.
*Se registra un 25% más de problemas respiratorios tipo asma.
* Ocurren 5 veces más de abortos espontáneos.
*Se tienen documentados el doble de casos de diabetes tipo II y de hipotiroidismo que las estadísticas medias.
* La frecuencia de calogenopatías (Enfermedades inflamatorias del tipo autoinmunes) es tres veces mayor que la media.
*Existe una cantidad considerable de niños con problemas de salud mental.
¿Quién es el culpable? Las investigaciones arrojaron que “existe
una contaminación intensa por acopio de cereales en el centro del
pueblo, contaminación con pesticidas en las calles, depósitos de
plaguicidas entre las casas de los pobladores y fumigaciones en la
periferia urbana a escasos metros de las viviendas”.
A
continuación le doy a conocer el comentario de uno de los participantes
en este estudio el Doctor Medardo Ávila Vázquez, integrante de la Red
de Médicos de Pueblos Fumigados al conocer el informe de la IARC-OMS:
“Desconocíamos
por completo que se iba a presentar este informe. Lo que dice
concretamente la IARC es que el glifosato, principal herbicida con el
que se fumiga, pasa a ser categorizado como del grupo 2A, que son
aquellos pesticidas en los que existe una probabilidad de que causen
cáncer. Ésta probabilidad se basa en que existen ya estudios de tipo
sanitario, como el nuestro y de laboratorio que confirmaron como impacta
el glifosato en el desarrollo de enfermedades cancerígenas”. Y concluyó
diciendo: “Esta es una gran herramienta en contra del discurso de los
agrotóxicos, cuyas empresas se defendían diciendo que son inocuos; a
partir de ahora nadie podría fumigar al menos a 500 o 1000 metros de
cualquier población como mínimo”.
La actitud de Monsanto y las
otras empresas biotecnológicas al negar sistemáticamente que el
glifosato cause daño debería ser considerado un Crimen de Lesa Humanidad
y al Medioambiente. ¿Lograremos algún día sentar a sus principales
accionistas en el banquillo de los acusados, entre quienes se encuentran
Bill y Belinda Gates, los Rockefeller, George Soros, los Rotschilds
entre otros? Y, en nuestra nación ¿Enjuiciaremos algún día a Mike
Arreola, titula de la Cofepris, que ha autorizado más de 132 productos
transgénicos que contienen glifosato, a Alejandro Monteagudo director de
AgroBio-México, cuya misión en esta vida es la de promocionar los
transgénicos en nuestro país, a Bolívar Zapata, el encargado por el
Gobierno Federal de impulsar la biotecnología, a los titulares de la
Semarnat y la Sagarpa por su complicidad con las empresas
biotecnológicas y a Peña Nieto cuyo papel al frente de la Presidencia
ha sido la de un vil lacayo a las órdenes del Gobierno de Estados Unidos
y de sus empresas? Espero que sí. Por lo pronto hay que difundir la
información y plantar lo más que se pueda y donde sea posible maíz
criollo para quitarnos de encima esa dependencia alimentaria que han
estado promoviendo los Gobiernos federales de los últimos 30 años y en
la que se basan para importar maíz transgénico (este año se importarán
10 mil millones de toneladas de maíz transgénico).
Por último,
sería bueno que se les hiciera a los anteriormente mencionados la
invitación a echarse un pegue de Faena** para ver cuál sería su
reacción, quizá haya entre ellos uno suficientemente estúpido que se
atreva a hacerlo.
** En México el herbicida hecho a base de glifosato se comercializa con ese nombre.
Autor: Antonio Ávila Rosas Profesor Normalista Rural. donchuchorosas@hotmail.com
Oriente Michoacano. Primavera del 2015. “Año Internacional del Suelo”
BIBLIOGRAFIA:
_”Glifosato, del escándalo al crimen corporativo”, Artículo. Autora: Graciela Vizcay Gomez. Fuente Rebelión.org/ Fecha: 9 de marzo del 2015.
_”EPA to American People: “Let Them Eat Monsanto´s Roundup Ready Cake”, Artículo. Fuente: Greenmedinfo.com
“The man who unmasked Patrick Moore”, Entrevista. Autor: Jonathan Mathews. Fuente: GMWATCH. Fecha: 4 de abril del 2015.
-“Killing you softly. And Secretely”. Autor: Ronnie Cummins. Fuente: Millions Against Monsanto. Fecha: 27 de marzo del 2015.
-“Monsanto Lobbyst Says You Can Drink A whole Quart of Roundup but Does This When Offered Some!. Autor: John Vibes. Fuente: Nationofchange.org/ Fecha: 29 de marzo del 2015.
-“Monsanto, imagine. Backgrounder, History of Monsanto´s Glyphosate Herbicides”. Fecha: Junio del 2005.
“Statement on WHO´s Finding that Monsanto´s Glyphosate Is Probably Carcinogenic”,Artículo. Fuente: Organic Consumers Association. Fecha: 18 de marzo del 2015.
-Glifosato en 28 millones de hectáreas: “No experimenten más con nuestro pueblo”. Artículo. Autor: Darío Aranda. Fuente EcoPortal.net. Fecha: 02-04-2015.
-“Durmiendo con el pesticida”. Fuente: Página 12. Fecha: 28-03-2015.
-“Patrick Moore´s Golden Rice campaign featured on the BBC”. Fuente: GMWATCH. Fecha: 06 de octubre del 2013.
-“Presentan un informe final sobre la localidad cordobesa que quintuplica la media mundial de casos de cáncer”, Nota periodística. Fuente: www. EcoPortal.net Fecha: 30-03-2015.
-“
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario